NUEVOS TRENES HISTÓRICOS CON DESTINO TERUEL

Los trenes históricos se fijan en Teruel por el enorme potencial turístico que ofrece. AZAFT celebrará su cuarenta aniversario en marzo con un viaje del Tren Azul a la capital turolense

Los trenes históricos se están fijando en Teruel por el enorme potencial turístico que tiene la provincia para la circulación de este tipo de convoyes, tras las últimas mejoras acometidas en la infraestructura, justo en el momento en que se ha anunciado para marzo el desmantelamiento de la vía del tren minero de Ojos Negros en su tramo final. 

Si el mes pasado circuló por la línea un tren histórico de los años 60 fletado por la empresa británica PTG Tours, en marzo lo hará el Tren Azul de la Asociación Zaragozana de Amigos del Ferrocarril y Tranvías (AZAFT) para celebrar su cuarenta aniversario, con la participación de la Asociación de Radioaficionados de Zaragoza.

El Tren Azul es una composición de vagones históricos, de siete vagones históricos de distintas épocas, el más antiguo de los años veinte del pasado siglo. Incluye dos furgones de correos con estafeta propia desde los que se podrá enviar correspondencia a lo largo del viaje, coches restaurante y coches camas.

Uno de los vagones es del año 1926 e incluye la marquetería original de esa década, mientras que otro es un coche salón de la jefatura del Estado, en el que viajaban los ministros y demás autoridades y que es de lujo, de los utilizados en trenes míticos de la compañía belga del Orient Express, que constituye todo un museo de historia en movimiento y que atrae turistas de toda España y del extranjero.

El viaje lo ha organizado la AZAFT para el próximo 23 de marzo con motivo de su cuarenta aniversario y se llevan vendidas ya el 60% de las más de 200 plazas disponibles, a un precio de 40 euros. Y además del aniversario, con este tren se quiere reivindicar esta infraestructura y todo el desarrollo turístico que se puede hacer en torno a ella.

El tren partirá a las 8:30 de la mañana de la estación de Casetas y tiene previsto llegar a Teruel a las 12:55. La máquina que arrastrará los vagones será una locomotora diésel de ADIF de la serie 310 operada por Alsa. En Teruel la visita y la comida será libre y a las cuatro se visitará la Asociación de Amigos del Ferrocarril de Teruel. A las 17:15 horas está previsto que el tren salga de regreso para llegar a Casetas a las 20:32.

Llama la atención que en tan poco tiempo dos trenes históricos se hayan fijado en la línea de Teruel, lo que se explica por las mejoras que se han acometido en la infraestructura, sobre todo la instalación del tren tierra, ya que permite la circulación con un solo maquinista y abarata el coste.

A esto también hay que sumar el que las Cortes Generales aprobaron a finales del año pasado una iniciativa para impulsar los trenes históricos ante la gran demanda que están teniendo, y la posibilidad de ofrecer un desarrollo alternativo a algunos de los territorios por los que discurren, muchos de ellos afectados por la despoblación. Como ejemplo puso la excelente respuesta que está teniendo el tren minero de Utrillas.

En este sentido, se ha de tener en cuenta que el recorrido entre Casetas y Teruel es idóneo para este tipo de actividades porque se trata del corredor del antiguo Central de Aragón, y su paisaje limpio sin grandes núcleos de población ofrece un atractivo añadido que agradecen los aficionados al ferrocarril. Además en el futuro está prevista la construcción de museos ferroviarios en Casetas y Caminreal, a lo que podría sumarse un tren histórico entre Santa Eulalia y Ojos Negros por el trazado del antiguo ferrocarril minero que todavía conserva la vía.

No obstante, el próximo desmantelamiento de esta última infraestructura, adjudicado ya por Emfesa a una empresa chatarrera de Valladolid que ha anunciado que comenzará los trabajos a principios de marzo, motivará que se pierda la posibilidad de darle un uso turístico a ese patrimonio turolense que desaparecerá definitivamente. Desde la AZAFT se cree que no era necesario levantar la vía y que su desmantelamiento se debe a una falta de de visión política, ya que eran compatibles los dos proyectos, además de que el tren histórico podría atraer a mucho más turismo que el cicloturista, que solo va de paso.

Es la segunda vez que la AZAFT viajará a Teruel con un tren histórico tras el primer viaje que tuvo lugar en 1994 con el Piquero Express, un automotor diésel. No había vuelto a hacerlo por el mal estado de la vía, que a finales del siglo pasado provocó numerosos descarrilamientos. 

Ahora que la infraestructura se ha empezado a mejorar, y sobre todo tras la instalación del tren tierra, han decidido viajar con el Tren Azul a Teruel para celebrar su cuarenta aniversario y porque tenían muchas ganas de volver a circular por esta línea, por su gran potencial de este corredor para la circulación de trenes históricos, y las múltiples posibilidades para el desarrollo del turismo ferroviario, que está en alza.

Fuente: Francisco Javier Millán - Diario de Teruel