Adif adjudica por casi 8 millones el proyecto de señalización y telecomunicaciones. La actuación busca adaptar el tramo a la circulación de trenes de 750 metros. Navajas se convertirá en estación de crucre, y las estaciones de Barracas y Estivella se mejorarán.
El consejo de administración de Adif ha aprobado la adjudicación del contrato de redacción del proyecto constructivo y ejecución de las instalaciones de señalización y telecomunicaciones del tramo ferroviario Teruel-Sagunto, por un importe de 7.814.122 euros.
Las obras, que persiguen avanzar en el desarrollo de las actuaciones previstas en el plan director de la línea de tren Zaragoza-Teruel-Sagunto, se han adjudicado a la empresa Enclavamientos y Señalización Ferroviaria Enyse, que tendrá un plazo de 18 meses para ejecutarlas.
Esta actuación, según ha informado el Ministerio de Fomento en un comunicado, se llevará a cabo en paralelo a la adecuación de estaciones para la construcción de apartaderos de 750 metros de longitud. Comprende, entre otras operaciones, la conversión del apeadero de Navajas (Castellón) en estación, con la instalación de un nuevo enclavamiento electrónico y los equipamientos asociados, la adecuación de los sistemas de gestión del tráfico en Estivella-Albalat (Valencia), Barracas (Castellón), Teruel y La Puebla de Valverde (Teruel), así como el tendido de una nuevas redes de cableado y la adaptación del control de tráfico centralizado (CTC) a las nuevas instalaciones.
También se realizarán las pruebas para garantizar el óptimo funcionamiento de las nuevas instalaciones de forma previa a su puesta en servicio. En paralelo, el Ministerio de Fomento ha abierto hace unos días el periodo de información pública para las expropiaciones del proyecto de modernización de la línea en los términos municipales de Estivella-Albalat del Tarongers, Teruel, Ferreruela de Huerva y Cariñena, según recoge el Boletín Oficial del Estado.
Estas actuaciones se enmarcan en el plan de inversiones comprometido para asegurar la competitividad de la línea como eje estratégico del corredor Cantábrico-Mediterráneo, que la UE ha incluido recientemente en el mapa de las redes transeuropeas.
El plan director de la línea, con un horizonte de ejecución hasta el 2023, representa una inversión de 386,6 millones y tiene como objetivo mejorar el estado de la infraestructura actual para potenciar especialmente para el tráfico de mercancías e impulsar así las conexiones ferroportuarias con los centros logísticos.
Fuente; El Periódico de Aragón
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