La muestra estará expuesta hasta el 30 de abril, en la Sala Manolo Valdés de Altura.
Hoy, viernes 10 de marzo, a las 19:30 horas, se inaugurará en la Sala Manolo Valdés de Altura la exposición “Trabajos Silenciados de la Mujer. De profesión: sus labores”. La exposición permanecerá abierta hasta el domingo 30 de abril.
La exposición reivindica la memoria de aquellas mujeres que, con su trabajo silencioso y silenciado en muchas ocasiones, han construido la historia. A propuesta de la alcaldía y de la concejalía de Igualdad del ayuntamiento de Altura, los comisarios de la exposición, Trini Carot Asensio y José Manuel López Blay, cronista oficial de la villa de Altura, lanzan una mirada comprometida al fondo fotográfico colectivo del Museo de la Memoria rescatando imágenes que muestran mujeres trabajando de maneras muy diversas, en algunas ocasiones, sin reconocimiento social, legal ni económico. Incluso, algunos trabajos no merecieron ni ser fotografiados.
Unas veces, contribuyendo con sus trabajos a la economía familiar (confeccionando, reparando o lavando la ropa, amasando el pan, encalando las fachadas, criando animales, vendiendo la cosecha) o bregando codo a codo con sus maridos en hornos, carnicerías, ultramarinos o bares.
Otras, desarrollando un trabajo de forma autónoma (peluqueras, modistas, cogiendo puntos a medias, elaborando queso…); o trabajando en fábricas y talleres (Esteve, Arnau, Nazario, Zorrilla, Inglés, Almela…) o en sus domicilios para empresarios que les proporcionaban las materias primas y pagaban por pieza elaborada.
Las fotografías que componen la exposición “Trabajos Silenciados de la Mujer. De profesión: sus labores", de mediano y gran formato, se acompañan puntualmente de objetos asociados a los trabajos que muestran las imágenes.
Esta exposición no hubiera sido posible sin la generosidad de cuantas personas han permitido escanear sus fotografías y la de quienes han cedido los objetos que las acompañan.
Obviamente, han quedado muchas imágenes de mujeres trabajadoras por recuperar. Peto ésta es una buena oportunidad para que afloren y puedan formar parte de ese proyecto colectivo que López Blay lleva impulsando desde el año 2003, Altura: Museo de la Memoria.
Fuente: ICAP
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