El libro "Conventos y Monasterios valencianos. Guía histórico-artística", de Miguel Ángel Catalá editado por Editorial Sargantana, habla de los monasterios de Valldecrist, Ara Christi, Portaceli, El Puig, Santo Espíritu, Socós de Jérica y del Niño Perdido de Caudiel, entre otros.
Desde la Editorial Sargantana (Paterna, Valencia) ha salido al mercado una cuidada novedad bibliográfica de temática artística, titulada “Conventos y Monasterios valencianos. Guía histórico-artística” (en dos volúmenes) de la que es autor el historiador Miguel Ángel Catalá Gorgues.
El libro pretende convertise en una obra de referencia sobre el patrimonio monacal y conventual de la Comunidad Valenciana, y recoge una selección de un total de treinta y cinco edificaciones, las más destacadas por su historia religiosa y artístico-monumental, de las cuales algunas de ellas aún perviven y otras han pasado a tener otros usos.
Se estructura a modo de fichas catalográficas siguiendo una misma estructura unitaria, y se describen de manera detallada todos los aspectos que conciernen a cada edificio: primeramente aparece una fotografía identificativa, incluso en algunas aparecen las plantas detalladas del recinto que ocupan. A continuación, se detalla la situación geográfica (población y provincia), sus orígenes, fundación y vicisitudes históricas; personajes destacados de la vida religiosa; una descripción del edificio conventual o monacal con todas la dependencias (claustro, estancias, etc.); La iglesia con una descripción del interior, sus bienes muebles localizados in situ, los destruidos que se conocen y los que por una u otra razón salieron del recinto y se encuentran en instituciones públicas o colecciones privadas nacionales o extranjeras, etc...
En el primer volumen hay un total de diecisiete monasterios, entre ellos: Convento de la Mare de Déu del Castell (Agres), Monasterio de San Jerónimo de Cotalba (Alfauir), Monasterio de Santa Faz (Alicante), La Real Cartuja de Valldecrist (Altura), Monasterio de Santa María de la Murta (Alzira), Convento de San Francisco (Benicarló), El Desierto de las Palmas (Benicàssim), Convento de San Francisco del Monte (Benigànim), Convento-Santuario de Nuestra Señora del Niño Perdido (Caudiel), Convento de la Mare de Déu del Miracle (Cocentaina), Real Monasterio de la Mare de Déu del Puig (El Puig de Santa María), Cartuja de Ara Christi (El Puig de Santa María), Convento de Santa Lucía (Elche), Convento de San José (Elche), Convento de Sant Esperit (Gilet), etc.;
Mientras, en el segundo hay un total de dieciocho conventos, entre ellos: Convento del Socós (Jérica), Abadía de Santa María de Benifassà (La Pobla de Benifassà), Convento del Corpus Christi (Llutxent), Convento de San Francisco (Morella), Cartuja de Santa María de Porta Coeli (Serra), Convento de la Visitación (Orihuela), Convento de Santo Domingo (Valencia), Abadía de Santa María de Valldigna (Simat de Valldigna), Convento del Carmen (Valencia), Convento de San Onofre El Nou (Xàtiva),Convento de San Miguel de los Reyes (Valencia), Convento-Santuario de Nª Sª de las Virtudes (Villena) etc.
El prólogo de la obra está escrito por Arturo Zaragoza Catalán, que indica en sus páginas qie la labor realizada en este libro por Miguel Ángel Catalá sobre los monasterios y conventos valencianos es rigurosa, ejemplar, importante y oportuna… además de una interesante, amena y didáctica publicación que da a conocer la inmensa riqueza cultural del patrimonio artístico valenciano. El carácter temático y su puesta al día lo convierten en una valiosa e imprescindible herramienta para diseñar el futuro de los sitios de la memoria que fueron los monasterios y conventos, y está destinado a convertirse en un clásico de la historiografía valenciana.
Eso sí, algunos datos referentes a los monasterios palantinos ya están obsoletos, pero no resta la importancia de la labor realizada.
Don Miguel Ángel Catalá
Gorgues (1949 - 2020) fue un especialista en historia del
arte que creó una obra formidable dentro de unos parámetros eruditos, pero con un poderoso carácter pedagógico que lo
llevó a convertirse en un renovador de su especialidad a través de sus
clases en la Universitat y de la dirección de los museos de la ciudad de
València. Y es que Catalá fue Director de Museos del Excmo.
Ayuntamiento de Valencia entre 1975 y 2013, y elegido Académico de
Número de la Real Academia de Bellas Artes de San Carlos de Valencia en
1977, pasando en 2009, a petición propia, a la condición de Académico
Supernumerario. El 6 de febrero de 1978 fue elegido, por unanimidad,
Secretario General de dicha Corporación, cargo que ostentó hasta el día 5
de febrero de 1991. Además, fue miembro de la Junta de Gobierno de esta
Real Academia, con el cargo de académico archivero-bibliotecario, entre
los años 2003 y 2007.
Autor de numerosas investigaciones,
entre sus publicaciones más recientes, se encuentran títulos como “Conventos y
monasterios valencianos. Su legado histórico-artístico y cultural”
(2016); su colaboración en “La Catedral de Valencia. Historia, Cultura y
Patrimonio” (2018); o “Arquitecturas sobre papel. Vistas de Roma.
Grabados del siglo XVI de la colección municipal” (en colaboración con
A. Espinós, 2015), destacando su obra póstuma “Conventos y monasterios valencianos. Guía
histórico-artística” (2019), así como la magnífica investigación que
publicó en el número 25 de la Colección Investigació & Documents,
editada por esta Real Academia, y que lleva por título “La Real Academia
de Bellas Artes de San Carlos, su establecimiento y consolidación, en
torno a 1768” (2018), trabajo inscrito en el marco de la conmemoración
del 250 aniversario de la promulgación de los estatutos de la
Institución.
Fuente:
Ramón Ribera - InfoEnpunto.com
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