Pincha ESTE ENLACE para ver mi Curriculum Vitae

domingo, 9 de marzo de 2014

EL ADIOS A OTRO ÁRBOL MONUMENTAL

El viento y los coleópteros parten la 'surera mare', árbol milenario ubicado entre Alfondeguilla y Chóvar, y emblema del Espadán con sus cerca de 5 metros de diámetro y 20 metros de altura. Se suma así a la pérdida el pasado año del Olmo de Castellnovo, que nos dejó a causa de la grafiosis después de 200 años.

Nadie quiere hacer leña del árbol caído, aunque la madera del alcornoque sea óptima para las chimeneas de los pueblos de interior de la Sierra de Espadán, a las acaballas del invierno. Y es que el pequeño municipio de Alfondeguilla (Castellón) ha perdido esta semana su árbol emblema, 'la surera mare', un alcornoque milenario, el más antiguo del término municipal -de ahí lo de mare (madre)-, y referencia de los hogareños y excursionistas de camino al Castillo de Castro. 

El viento, y posiblemente el daño provocado por coleópteros del géreno cerambix -insectos perforadores de madera vieja o muerta- han partido este ejemplar con más de mil años de antigüedad y cerca de 5 metros de diámetros, que se alzaba a 20 metros de altura en la senda al castillo de Alfondeguilla. 

Seis personas miembros del Club de Muntanya Castro y del Ayuntamiento tuvieron que cortar este miércoles el milenario ejemplar con todo su pesar, puesto que lo consideran un "símbolo" de la comarca y un distintivo para senderistas y caminantes. 

De hecho, 'la madre de todos los alcornoques' de la cantonà se exhibe en el recorrido de subida al castillo y punto de orientación en las pruebas de montaña. El ejemplar, señalaba el punto kilométrico en el que se halla el corredor y la distancia que queda para acceder al castillo de Castro, casi en la mitad del camino. Y además, es parada 'obligatoria' de los excursionistas y una de las fotos más espectaculares del paisaje. 

Al parecer, el fuerte viento del domingo 2 de marzo parece que zarandeó y casi doblegó el alcornoque, y las ráfagas de más de 70 kilómetros por hora que se alcanzaron a principios de la siguiente semana, hicieron el resto. Así quedó partida la 'surera mare' pese a su tronco de cinco metros de diámetro, que entre cuatro personas abrazadas al árbol aún no creo que se abarcara todo el diámetro del mismo. 

Pero mil años sobre raíces y corcho no se tumban con golpes de viento, ni a 100 kilómetros por hora. El árbol, monumental pero envejecido, era desde hace tiempo pasto de gusanos que se alimentan de madera vieja y muerta. Los miembros del club excursionista y del Ayuntamiento así lo constataron el miércoles, al observar el tronco, antaño vivo, macizo y robusto, ahora vacío por dentro.

Alertados por vecinos que a diario utilizan la senda de Castro, las dos personas del Ayuntamiento y las cuatro del club de montaña recorrieron el camino que tantas veces han cumplido para disfrutar del paisaje, porque el árbol caído ahora molestaba al paso de los senderistas. Dos motosierras y tres horas de trabajo de seis personas se necesitaron para despejar la senda, huérfana ahora de tan emblemático vegetal.

Precisamente, hoy domingo 9 de marzo se celebra la Cursa de Muntanya Castro de Alfondeguilla 2014, prueba puntuable de 18,4 kilómetros, un desnivel de 1.160 metros, que parte a las nueve de la mañana desde la plaza de la Diputación, al Aïgualit, Penyalba, Ereta, Pitera, Senda Artana, Font Marc, Fonteta Penyeta, Cantallops y regreso al núcleo urbano de Alfondeguilla. Desgraciadamente, la Surera Mare ya no contemplará el paso de los corredores...
Fuente: Sandra Morales - El Mundo.es

No hay comentarios:

Publicar un comentario