Tras Soria y Zaragoza, ahora se está trabajando en el recorrido valenciano.
El Consorcio Camino del Cid ha comenzado los trabajos de revisión
del trazado senderista del itinerario. Como en campañas anteriores, la
empresa UTM Desarrollos es
la encargada de llevar a cabo esta tarea que tiene como finalidad el
mantenimiento de la señalización existente así como su refuerzo a través
del uso de marcas de pintura, estacas de madera, placas rotuladas o
vinilos.
Los trabajos comenzaron hace dos
semanas en las provincias de Soria y Zaragoza, y ahora continua en el
recorrido por Valencia. Tras dejar Levante esperan centrar sus esfuerzos
en Burgos “antes de que empiece a hacer frío de verdad”, señala
Víctor Gutiérrez, responsable de Proyectos de UTM que reconoce no tener
una fecha cerrada para la finalización de los trabajos ya que todo
depende de la climatología “con lluvia, por ejemplo, no se puede
marcar con pintura. Además los caminos se vuelven impracticables y
aunque ahora el clima nos está dando una tregua debemos aprovechar estos
días en los que las horas de luz se reducen cada día más”.
Tramos urbanos de la ruta: una prioridad
El
Camino del Cid cuenta con 1.400 kilómetros se sendero que serán
revisados en su totalidad. No obstante, se priorizarán los trabajos en
aquellos tramos de sendero que presentan alguna complicación para el
viajero. De igual forma, se hará un esfuerzo especial en tramos urbanos
para que el visitante no tenga problemas al atravesar las poblaciones.
El
Consejo Rector del Consorcio Camino del Cid (celebrado en Soria a
finales del pasado año) acordó instalar entre 2.600 - 2.700 señales en
las principales rutas del Camino del Cid. En este sentido, UTM señala
que cada año creen que se pondrán menos que el anterior “pero por lo que vamos viendo sucede lo contrario”.
Por otro lado, aseguran que, siguiendo los criterios de señalización de
la Federación Española de Deportes de Montaña y Escalada (FEDME) se
instalarán el óptimo de señales “evitando la sobreseñalización”.
Sobre
el estado de las señalética existente, Víctor Gutiérrez admite que
algunas de las señales colocadas han desaparecido, muchas marcas han
sido borradas por la lluvia, viento o desgaste y, en otras ocasiones, la
maquinaria agrícola las ha eliminado y avanza que es posible que, en
esta campaña, un 25 por ciento de las señales que se coloquen serán
reposiciones de las anteriores.
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