El Ayuntamiento de Serra firma un convenio para rehabilitar el edificio de La Prunera, un antiguo albergue que data del año 1913, ubicado junto al GR-10 y próximo a la Senda de los Cartujos
El Ayuntamiento de Serra
y el Patronato de la Juventud Obrera de Valencia han firmado un convenio de
colaboración para rehabilitar el conocido como Albergue de la Prunera,
propiedad de esta entidad privada, como punto de encuentro juvenil con
el objetivo de fomentar el sendero europeo de gran recorrido GR10 que
pasa por la Sierra de la Calderona.
El acuerdo supone el uso de estas instalaciones para la realización de las prácticas incluidas en el ciclo de formación profesional
de conducción del medio natural que ha puesto en marcha el patronato,
entre las que cabe destacar las actividades deportivas como el
senderismo, la bicicleta de montaña o las rutas a caballo por los
parajes que conforman el parque natural.
La puesta en marcha del plan estratégico del turismo en este parque natural municipal potenciará el desarrollo sostenible de los municipios de los alrededores con la puesta en marcha de iniciativas locales, empresariales y sociales de forma que el Albergue de la Prunera permitirá acoger a estudiantes de cualquier punto de Europa que quieran conocer el progreso ambiental de la Calderona.
La iniciativa se enfocará, además, hacia iniciativas relacionadas con la prevención de incendios, la educación y la sensibilización ambiental y el desarrollo de productos y servicios de turismo ambiental. En este contexto, La Prunera acogerá actividades escolares, familiares y grupos deportivos no motorizados en el medio natural para programas educativos y de tiempo libre.
El edificio de la Prunera se empezó a construir en el año 1913, utilizándose como uno de los primeros albergues para colonias escolares de la Comunidad Valenciana y de España. El edificio alza sus dos plantas de planta rectangular en medio de una ladera de fuerte pendiente de la Calderona, que condiciona su distribución interior. Por él pasaron miles de escolares, grupos juveniles y amantes de la naturaleza, teniendo su mayor actividad durante los años 80 y 90 del pasado siglo, cuando acogía los movimientos europeos juveniles surgidos en algunos países como Suiza, Francia, Italia o Alemania desde finales del siglo XIX, y que la institución que lo dirigía comenzó a organizar desde principios del siglo XX, llevando a sus escolares a la Hospedería de la Cueva Santa, en Altura, en 1906, y luego a este edificio que construyó exprofeso.
El albergue se ha deteriorado por el paso del tiempo, y desde que fue cerrado en 2011, los actos vandálicos se han cebado en él hasta el punto que en el interior se han producido diversos robos de materiales, especialmente de cobre de la cocina y de los lavabos.
El interior del edificio está dotado de habitaciones colectivas para 100 personas, una cocina, un comedor para 60 comensales, un salón con chimenea, una enfermería y un habitáculo para diverso material, un campo de fútbol y una zona de juegos.
El trayecto hacia la Prunera discurre por una pista forestal que se prolonga cerca de tres kilómetros dejando a su paso algunos parajes como la Font del Llentiscle, la Font del Poll, Rebalsadors o la Falaguera, y muy próxima a la Cartuja de Portaceli, o a senderos como el GR-10 o.
Desde el albergue se pueden realizar numerosas excursiones a miradores, cumbres fuentes, parajes naturales singulares, construcciones rurales, etc…tanto a partir del sendero europeo GR10, la Senda de los Cartujos, así.como a partir de otras sendas y caminos forestales tradicionales del término municipal y municipios colindantes.
La puesta en marcha del plan estratégico del turismo en este parque natural municipal potenciará el desarrollo sostenible de los municipios de los alrededores con la puesta en marcha de iniciativas locales, empresariales y sociales de forma que el Albergue de la Prunera permitirá acoger a estudiantes de cualquier punto de Europa que quieran conocer el progreso ambiental de la Calderona.
La iniciativa se enfocará, además, hacia iniciativas relacionadas con la prevención de incendios, la educación y la sensibilización ambiental y el desarrollo de productos y servicios de turismo ambiental. En este contexto, La Prunera acogerá actividades escolares, familiares y grupos deportivos no motorizados en el medio natural para programas educativos y de tiempo libre.
El edificio de la Prunera se empezó a construir en el año 1913, utilizándose como uno de los primeros albergues para colonias escolares de la Comunidad Valenciana y de España. El edificio alza sus dos plantas de planta rectangular en medio de una ladera de fuerte pendiente de la Calderona, que condiciona su distribución interior. Por él pasaron miles de escolares, grupos juveniles y amantes de la naturaleza, teniendo su mayor actividad durante los años 80 y 90 del pasado siglo, cuando acogía los movimientos europeos juveniles surgidos en algunos países como Suiza, Francia, Italia o Alemania desde finales del siglo XIX, y que la institución que lo dirigía comenzó a organizar desde principios del siglo XX, llevando a sus escolares a la Hospedería de la Cueva Santa, en Altura, en 1906, y luego a este edificio que construyó exprofeso.
El albergue se ha deteriorado por el paso del tiempo, y desde que fue cerrado en 2011, los actos vandálicos se han cebado en él hasta el punto que en el interior se han producido diversos robos de materiales, especialmente de cobre de la cocina y de los lavabos.
El interior del edificio está dotado de habitaciones colectivas para 100 personas, una cocina, un comedor para 60 comensales, un salón con chimenea, una enfermería y un habitáculo para diverso material, un campo de fútbol y una zona de juegos.
El trayecto hacia la Prunera discurre por una pista forestal que se prolonga cerca de tres kilómetros dejando a su paso algunos parajes como la Font del Llentiscle, la Font del Poll, Rebalsadors o la Falaguera, y muy próxima a la Cartuja de Portaceli, o a senderos como el GR-10 o.
Desde el albergue se pueden realizar numerosas excursiones a miradores, cumbres fuentes, parajes naturales singulares, construcciones rurales, etc…tanto a partir del sendero europeo GR10, la Senda de los Cartujos, así.como a partir de otras sendas y caminos forestales tradicionales del término municipal y municipios colindantes.
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