El proyecto de puesta en valor del yacimiento romano de El Prado, que comenzó en Diciembre de 2016, tenía como principal objetivo la documentación, limpieza y consolidación de las estructuras excavadas. Tras varios meses de trabajo, y con gran parte de las tareas finalizadas, el proyecto ha entrado en su segunda fase, destinada a la difusión del yacimiento entre el público como atractivo turístico y
convertirlo en una de las zonas de interés turístico de la localidad. .
En el yacimiento, ubicado en la partida de los
Cabillos, a unos tres kilómetros del núcleo poblacional, se ha documentado una villa agricola del periodo Alto Imperial (ss. I - III d.C.), de la que se han exhumado varias estancias y parte del edificio termal (balneum), en el que destacan varias estancias:
-1: TEPIDARIUM: Sala de baño templado, en la que se conserva una pequeña bañera (“alveus”). Al ser un edificio de pequeñas dimensiones, este espacio también podia ser utilizado como vestuario (“apodyterium”)
-2: HYPOCASTUM: Sistema de calefacción de la sala de baño caliente (“caldarium”), formado por un pavimento elevado mediante pilares y arcos (“suspensura”), y con una cámara entre los muros exteriores y las paredes internas (“concameratio”), que permitia la circulación del aire caliente.
-3: PRAEFURNIUM: Boca del horno
-4: PROPIGNEUM: Sala utilizada para el almacenacimiento de combustible para el horno.
De momento, ya se ha publicado un enlace a un modelo fotogramétrico 3D interactivo en el que se puede conocer los restos excavados de la villa romana con anotaciones informativas:
(el modelo no puede ser visualizado en todos los dispositivos móviles, se recomineda visionarla en un PC o Tablet)
Por otro lado, desde el Ayuntamiento, invita a todas la persona interesadas a unirse a la excursión que se realizará el viernes 28 de Julio (que saldrá desde la Plaza Mayor a las 19:00 horas), para visitar el yacimiento y conocer los trabajos que allí se realizan, tanto de puesta en valor como de excavación.
Cabe recordar que este yacimiento salió a la luz en 2007, después de la realización de las catas para ejecutar las excavaciones para la colocación del montaje de varias torres eléctricas de evacuación del parque eólico de la zona seis. Tras las catas, los arqueólogos detectaron esta villa, de las más antiguas que conserva el municipio que, ahora, subvencionada por el propio ayuntamiento en una primera fase de actuación por un total de 15.000 euros, ha puesto en valor bajo la dirección del arqueólogo Manuel Molina.
Las labores de recuperación comenzaron con la limpieza arqueológica de las estructuras, y continuarán con la reparación y levantamiento de algunos muros, y la colocación de paneles informativos, lo que permitirá al visitante entender los restos.
Para proteger el yacimiento, hace tres años adquiría las parcelas en las que se hallaron los restos con el fin de poner en valor este patrimonio histórico y convertirlo en un atractivo turístico. Para ello, los restos fueron además declarados bien de relevancia local y fueron vallados de manera perimetral para, en la medida de lo posible, preservar su conservación. Sin embargo, la falta de protección de los restos desde su descubrimiento ha provocado durante los últimos años una rápida erosión del yacimiento en muros y estructuras, con un serio peligro de desaparición.
El yacimiento de El Prado fue documentado como una villa romana de tipo agrícola, del periodo Alto Imperial (ss. I – III d.C.), en la que se exhumaron diversos espacios y zonas de uso, como un pequeño complejo termal (balnea) o un patio porticado en la zona residencial.
Cabe recordar que este yacimiento salió a la luz en 2007, después de la realización de las catas para ejecutar las excavaciones para la colocación del montaje de varias torres eléctricas de evacuación del parque eólico de la zona seis. Tras las catas, los arqueólogos detectaron esta villa, de las más antiguas que conserva el municipio que, ahora, subvencionada por el propio ayuntamiento en una primera fase de actuación por un total de 15.000 euros, ha puesto en valor bajo la dirección del arqueólogo Manuel Molina.
Las labores de recuperación comenzaron con la limpieza arqueológica de las estructuras, y continuarán con la reparación y levantamiento de algunos muros, y la colocación de paneles informativos, lo que permitirá al visitante entender los restos.
Para proteger el yacimiento, hace tres años adquiría las parcelas en las que se hallaron los restos con el fin de poner en valor este patrimonio histórico y convertirlo en un atractivo turístico. Para ello, los restos fueron además declarados bien de relevancia local y fueron vallados de manera perimetral para, en la medida de lo posible, preservar su conservación. Sin embargo, la falta de protección de los restos desde su descubrimiento ha provocado durante los últimos años una rápida erosión del yacimiento en muros y estructuras, con un serio peligro de desaparición.
El yacimiento de El Prado fue documentado como una villa romana de tipo agrícola, del periodo Alto Imperial (ss. I – III d.C.), en la que se exhumaron diversos espacios y zonas de uso, como un pequeño complejo termal (balnea) o un patio porticado en la zona residencial.
Fuentes: Ayto Viver / Ana Monleón
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