Paz Olmos anuncia que la Cartuja de Vall de Christ recuperará elementos perdidos
La directora general de Patrimonio Cultural Valenciano, Paz Olmos, ha presentado los próximos proyectos que se van a llevar a cabo en la Cartuja de Valldecrist en Altura. Durante el acto ha estado acompañada por Francisco Medina, Director Territorial de Cultura de la Provincia de Castellón, Rafael Rubio, alcalde de Altura y por Enrique Martí, arquitecto responsable de los proyectos.
Paz Olmos ha explicado que "se trata de dos proyectos importantes e impactantes puesto que ambos serán muy visibles en el conjunto de la Cartuja al tratarse de reconstrucciones de elementos hasta ahora desaparecidos".La primera actuación se desarrollará en la Iglesia Mayor de la Cartuja. El proyecto, que ya se encuentra finalizado, cuenta con un presupuesto de 577.296,34 €. En la anterior intervención en la iglesia se consolidaron los muros originales que quedaban en pie y se levantaron los que faltaban del perímetro, preparándolos para recibir la cubierta. Es precisamente la reposición de esta cubierta, el proyecto que hoy se presenta. En la misma intervención se incluye la realización del tambor y la restauración de un sepulcro del claustro de San Jerónimo el objeto del proyecto que hoy se ha dado a conocer.
Esta intervención resulta imprescindible para evitar la degradación de los restos de decoración que quedaban en su interior y para facilitar su uso. La cubierta que se va a realizar va a ser a dos aguas y terminada con teja árabe, tanto en la nave principal como en el trasagrario. Se va a realizar de manera que esté estructuralmente preparada para una posterior reconstrucción de la cúpula, que se hará en fases posteriores.En el crucero se realizarán los arcos, pechinas, viga y tambor superior con una terminación provisional mediante una pirámide superior a modo de cúpula. Por último se adecuará el sepulcro del muro del claustro de san Jerónimo
La vida dentro de las cartujas tenía un ritmo y una espiritualidad especiales y diferentes. Este espíritu y esta manera de vivir son los elementos que se quieren recuperar y transmitir a través del segundo proyecto que hoy se presenta. Se trata de la reconstrucción de una de las 24 celdas que ocupaban los monjes cartujos y en las que desarrollaba la mayor parte de su actividad diaria. Paz Olmos ha declarado que "más allá de la reconstrucción de restos arquitectónicos, la restauración y la rehabilitación de los edificios cobra verdadero sentido cuando, como en este caso, se recuperan y transmiten los valores con lo que fueron edificados y las maneras de vivir que en ellos se desarrollaron".
Al hablar de la celda de un cartujo, no se debe pensar en la reducida habitación que conformaba la celda en un convento. La celda cartuja era una vivienda con dos plantas y huerto. En la inferior estaban todas las dependencias importantes para la vida del cartujo y la superior sólo se usaba como desván.Para realizar una reconstrucción fiel partiendo de los pocos restos arquitectónicos y arqueológicos que quedan, se han tomado como modelo las celdas de otras cartujas de la provincia de Tarragona, que mantienen tipologías similares. De la celda que se va a rehacer sólo quedan en pie dos muros laterales de escasa altura, por lo que la reconstrucción de dicha celda será casi total. Reconstruyendo desde la cimentación hasta los muros que la cierran, los forjados, la escalera, la cubierta a dos aguas, los porches anexos, la chimenea y las particiones interiores. Se le dotará de pavimentos, se reconstruirán los dinteles, las jambas. Se colocará la carpintería interior y exterior, revestimientos de yeso, pinturas y cerrajería. Todo ello con los mismos materiales empleados en la construcción de las celdas originariamente y con métodos tradicionales.
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