Será el próximo jueves, 27 de agosto, a las 19 horas, en la Sala de los Alcaldes del Ayuntamiento de Segorbe.
Cuando están a punto de dar inicio las fiestas patronales de Segorbe, donde el principal reclamo es su Entrada de Toros y Caballos, declarada Fiesta de Interés Turístico Internacional, la ciudad va a presentar el libro "Alonso Cano, Obispo de Segorbe, y su pensamiento Taurino", para dar así ya un aperitivo a la fiesta nacional.
Sus autores, Rafael Simón Abad, cronista de la ciudad y David Montolio Torán, conservador del Museo de la Catedral, procederán a su presentación el próximo jueves, 27 de agosto, a las 19 horas, en la Sala de los Alcaldes del Ayuntamiento de Segorbe.
La obra, cuya edición será de la Fundación Bancaja, que la englobará dentro de la Colección Orphenica Lyra repasa la historia de la fiesta de los toros y todos sus intentos de prohibición desde sus mismos inicios hasta el siglo XVIII, en España y Segorbe, a través de todos su autores, hasta la llegada del obispo Alonso Cano de Segorbe, con su altísima entidad intelectual y un espíritu un tanto "antitaurino". En este trabajo se recoge documentación inédita y una presentación facsímil acerca de su pensamiento, que influyó definitivamente, sin quererlo, en la concepción de una fiesta tan reconocida como la Entrada de Toros y Caballos de Segorbe.
Alonso Cano (1770-1780), fraile trinitario, teólogo de Su Majestad y calificador del Santo
Oficio, fue además Miembro de la Real Academia de la Historia. Ya como obispo de Segorbe, puso en funcionamiento el Seminario
Conciliar y la Biblioteca Pública instalada en el Palacio Episcopal. Procedió a la reducción de
beneficios, dotó a las parroquias de menos recursos y propició instituciones de apoyo a los
labradores. Patrocinó la nueva construcción de la iglesia parroquial de Sot, modelo que
posteriormente en sus decoraciones se imitó en otros edificios eclesiásticos, y en la catedral
procedió a la reforma del coro.
Pero en lo que al libro se refiere, se tratará su labor ejercida en materia de costumbres, donde intentó la reforma de las fiestas, evitando la mezcla con
actos profanos, singularmente en la cuestión de las corridas de toros, y la ostentación de las
cofradías.
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