Estos proyectos quedan enmarcados en los proyectos de recuperación de edificios emblemáticos valencianos de la Diputación de Valencia.
La Diputación de Valencia ha concedido 39.000 euros para la
realización de dos proyectos de restauración de edificios emblemáticos
valencianos en dos municipios del Camp de Morvedre. Las
intervenciones previstas por las ayudas económicas están destinadas a
la realización de obras de restauración para la conservación de bienes
inmuebles de la provincia de Valencia, que posean valores históricos,
artísticos o de interés local (como antiguos hornos, molinos, palacios
fuentes, bodegas o iglesias) y de elementos integrados en los mismos,
que poseen especial significación tanto para los municipios valencianos
como para los ciudadanos de la provincia, sean de carácter religioso o
civil, a los que se pretende devolver el esplendor original.
Los
proyectos cubiertos por esta financiación son las obras de restauración
de “les basses del llavaner municipal” de Faura, con una subvención de 9.000
euros y la restauración de los esgrafiados de la iglesia parroquial de
Torres Torres, que contará con 30.000 €.
La actuación de Faura ya ha sido ejecutada
El
actual “llavaner” de Faura data de las postrimerías de los años 50, cuando
sustituyó al viejo. Se alimenta de las aguas de la Font de Quart que
discurren por la huerta hacia el marjal y la mar. Durante años, las
mujeres de Faura lo compartieron como lugar de trabajo, y los niños en
verano para tomar el baño y jugar.
Este espacio fue
rehabilitado por el Ayuntamiento, convirtiéndolo en sala de
exposiciones, con su emblemático “Betlem del Llavaner” que cada Navidad
atrae a numerosas personas, uso que comparte con el tradicional. Está
considerado bien de interés local y espacio etnológico de interés local.
Como
se ha mencionado anteriormente, la intención del Ayuntamiento era
mantener este Patrimonio inmueble de relevancia local con condiciones
seguras, salubres y de decoro, dotando, en este caso, al interior de
estas basas, de las características necesarias para que el agua se
mantenga en su interior de manera totalmente estanca, impermeabilizando
el fondo y las paredes laterales, e incluso revestirlas de un gres para
que tenga mayor estanqueidad.
En primer lugar, se vació el
agua de las basas y se cerró la entrada de agua a través de la acequia.
Una vez secas en su interior, se procedió al picado de toda la
superficie interior, tanto de paramentos verticales como el horizontal,
eliminando todos los elementos faltos de agarre. Una vez
realizadas todas las operaciones de “limpieza” se realizaron las labores
de revestimiento, mediante un enfoscado de cemento con productos
hidrófugos para dotarlos de una mayor estanqueidad. Finalmente
se procedió a realizar un chapado con piezas de gres, de tonalidades
suaves, para dotar a estas basas de una estanqueidad absoluta.
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