La Guardia Civil está investigando el robo de la talla de la virgen del Santuario de la Cueva Santa de Altura, patrona de la Diócesis de Segorbe-Castellón, al que el autor o autores de los hechos accedieron tras forzar la puerta de entrada al recinto.
Relicario con la imagen que han sido sustraidos |
La imagen de la Virgen de la Cueva Santa ha sido robada hoy del interior del Santuario de la Cueva Santa de Altura, en el que unos individuos han entrado esta madrugada reventando varias puertas para entrar a robar.
Los hechos han sido descubiertos a las diez de la mañana por los encargados de mantenimiento del centro, que inmediatamente han alertado a la Guardia Civil, el Ayuntamiento de Altura, el Patronato de la Cueva Santa y el Obispado.
La venerada imagen de la Virgen ha sido robada con el relicario de plata y oro que la sustenta, obra del renombrado orfebre valenciano Piro, que representa una alegórica imagen de Fray Bonifacio Ferrer, al que se atribuye la autoría de la imagen, en el momento de entregar la virgen al pastor que la leyenda cuenta que la halló e incluye unla herradura con piedras preciosas engarzadas y la corona valiosísima realizada por famosos orfebres, así como el collar de perlas ofrecido por la Cofradía de Andújar de Jaen que portaba la Virgen.
Además, los ladrones también han reventado y robado de su interior haciendo un butrón el contenido de dos cajas fuertes a las iban a parar las limosnas ubicadas en las escaleras de bajada al altar principal, así como la recaudación de las cajas de las luminarias de ofrenda que rodean este, provocando en ello graves destrozos.
Todo ello hace sospechar que los ladrones buscaban dinero en lugar de obras de arte, a pesar que los mismos entraron en la tienda de regalos que hay junto al santuario mariano y se llevaron varias replicas de la imagen. Sin embargo, no se han hechado a faltar las numerosas medallas de oro que estaban a la venta. De cualquier forma la Guardia Civil no descarta ninguna hipótesis
Desde el patronato de la Virgen desean trasmitir “un mensaje de tranquilidad a la población, agradeciendo sus muestras de solidaridad y pidiendo su colaboración más estrecha con las autoridades para el esclarecimiento de los hechos y poder así recuperar cuanto antes a nuestra venerada virgen”, afirmó el párroco local, Juan Manuel Gallén.
Templete-Relicario anterior a la Guerra Civil. |
Por su parte el obispado de la diócesis Segorbe-Castellón, del que la Virgen es patrona, emitirá un comunicado sobre lo ocurrido.
Desgraciadamente, no es la primera vez que alguien roba el relicario y la imagen de la Virgen de la Cueva Santa, pues ya durante la Guerra Civil se llevaron el templete de plata regalado por los Duques de Segorbe en el siglo XVII que albergaba la sagrada Imagen, perdiéndose para siempre una de las imágenes que la tradición databa del siglo XIV, cuando los cartujos las repartían entre las gentes para difundir el culto a la Madre de Dios.
De aquel nefasto acontecimiento son varias las versiones que circulan sobre lo que sucedió tras su sustracción a los Carmelitas que en aquel momento moraban en la Cueva Santa, quienes forzados por el Frente Popular de la Villa de Altura entregaron a estos las llaves del Santuario, trasladando la Imagen a la Villa.
A partir del traslado de la Efigie, varios testimonios contradicen cual fue el final de la misma, en primer lugar se cuenta que estaba en el Ayuntamiento de la Villa y se escondió en una vasija destruyéndose posteriormente tras el incendio de este edificio. En segundo lugar se cuenta que la Imagen se depositó en el Ayuntamiento sobre una cómoda entre otros utensilios de valor y cayó al suelo haciéndose en añicos, (en tal caso se cuestiona que se hicieron con esos pedazos, ya que se podría haber realizado una reconstrucción de la misma o haberlos guardado como reliquias). En tercer lugar, se cuenta que la Imagen fue enterrada en un lugar desconocido y que se perdió el documento que indicaba el lugar quedando desaparecida. Y por último el testimonio de que pudo haber embarcado a Sudamérica, perdiéndose su paradero.
Si que podemos saber, a través de documentos fotográficos que el estado que presentaba la Imagen de la Cueva Santa ya a principios del siglo XX, era de un deterioro importante, pero en tal caso se trataba de una reliquia de un valor incalculable, ya que si que podemos saber con certeza que la Imagen procedía de mediados del siglo XVII con seguridad, dada la forma genuina del estuche-relicario que costearon los Duques de Segorbe.
En 1939, terminada la Guerra Civil, los Carmelitas tomaron posesión de nuevo del Santuario y al no tener Imagen, hubo que colocarse otra nueva que databa de alrededor de principios del siglo XVIII. Para recuperar el culto anterior y mostrar tranquilidad a los peregrinos se difundió que la Imagen repuesta se trataba de una antigüedad equivalente a la desaparecida. El pueblo así lo creyó como se puede comprobar en la explosión de fervor en torno a la Imagen producida en el año 1949, con su traslado, primero e único de esta Imagen repuesta, a la Iglesia Parroquial de San Miguel de Altura y a la Catedral de Segorbe.
Ahora, a la espera de que la imagen sea repuesta o encontrada, el Santuario ha quedado cerrado al público “sine die”, hasta nueva orden. Y si no, confiemos en la tradición, como muestra este ladrillo.
De aquel nefasto acontecimiento son varias las versiones que circulan sobre lo que sucedió tras su sustracción a los Carmelitas que en aquel momento moraban en la Cueva Santa, quienes forzados por el Frente Popular de la Villa de Altura entregaron a estos las llaves del Santuario, trasladando la Imagen a la Villa.
Imagen de la Virgen en 1906 |
A partir del traslado de la Efigie, varios testimonios contradicen cual fue el final de la misma, en primer lugar se cuenta que estaba en el Ayuntamiento de la Villa y se escondió en una vasija destruyéndose posteriormente tras el incendio de este edificio. En segundo lugar se cuenta que la Imagen se depositó en el Ayuntamiento sobre una cómoda entre otros utensilios de valor y cayó al suelo haciéndose en añicos, (en tal caso se cuestiona que se hicieron con esos pedazos, ya que se podría haber realizado una reconstrucción de la misma o haberlos guardado como reliquias). En tercer lugar, se cuenta que la Imagen fue enterrada en un lugar desconocido y que se perdió el documento que indicaba el lugar quedando desaparecida. Y por último el testimonio de que pudo haber embarcado a Sudamérica, perdiéndose su paradero.
Si que podemos saber, a través de documentos fotográficos que el estado que presentaba la Imagen de la Cueva Santa ya a principios del siglo XX, era de un deterioro importante, pero en tal caso se trataba de una reliquia de un valor incalculable, ya que si que podemos saber con certeza que la Imagen procedía de mediados del siglo XVII con seguridad, dada la forma genuina del estuche-relicario que costearon los Duques de Segorbe.
En 1939, terminada la Guerra Civil, los Carmelitas tomaron posesión de nuevo del Santuario y al no tener Imagen, hubo que colocarse otra nueva que databa de alrededor de principios del siglo XVIII. Para recuperar el culto anterior y mostrar tranquilidad a los peregrinos se difundió que la Imagen repuesta se trataba de una antigüedad equivalente a la desaparecida. El pueblo así lo creyó como se puede comprobar en la explosión de fervor en torno a la Imagen producida en el año 1949, con su traslado, primero e único de esta Imagen repuesta, a la Iglesia Parroquial de San Miguel de Altura y a la Catedral de Segorbe.
Ahora, a la espera de que la imagen sea repuesta o encontrada, el Santuario ha quedado cerrado al público “sine die”, hasta nueva orden. Y si no, confiemos en la tradición, como muestra este ladrillo.
Foto: Blog Peña Ramiro |
En último y en este país vivimos como muy importantes cosas que no lo son, pues se pretende cambiar los valores éticos y religiosos, sin que lo que se implanta tenga valor alguno. Siendo en este cambio forzado de valores muy propio el que los anteriores se mantengan en la gente integra, Honrada, responsable y consciente; pero en los faltos de raciocinio, de inmediato se agarran a las nuevas modas en donde el respeto a la familia, la propiedad, la creencia religiosa, dicho respeto brilla por su ausencia. Siendo todo cuanto está ocurriendo el fruto de las corrientes políticas modernas que todo lo justifican y alientan, y sus mamporreros inconscientes y carne de cañón realizan.
ResponderEliminarLo que no saben los que han cometido el robo, y desde tiempos ancestrales mantiene la Sagrada Cueva, sagrada para los musulmanes y los cristianos, es que su Gracia bendice a los buenos en naturaleza, maldice a los de mala sombra. Tengan paciencia los devotos de la Cueva santa que los que han cometido el sacrilegio lo pagarán. Aclaramos que esta narración no es cristiana, pues la heredamos de los tiempos anteriores a la conquista de estas tierras por los cristianos, pero siempre se cumple. So. Andrés Castellano Martí. Gracias.
La Santísima Virgen de la Cueva de Altura a quién tanta Salud y favores le he pedido desde muy niño todos me los ha concedido. Dios quiera que vuelva a su lugar de origen, ya que este lugar es Santo como ella. Y sepan estos malvados que han realizado el GRAN SACRILEGIO DE SU VIDA. Y cuando Dios los examine al atardecer de la vida no tendrán tan dulce abogada que interceda por ellos, pués ellos mismos han buscado su condena eterna y privado a los Devotos de ofrendar a Nuestra venerada y Santa Madre y de poder ir a refugiarnos en su Sagrado Templo.
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