Pincha ESTE ENLACE para ver mi Curriculum Vitae

sábado, 8 de marzo de 2025

EL CONTRAPLANO DEL TURISMO

Si el paisaje de las tierras de interior es también un reclamo para una parte más o menos significativa de esa fuente de ingresos que son los turistas, habrá que preocuparse y ocuparse algo más de él.

ARTÍCULO DE OPINIÓN DE: 
Nel.lo Pellisser (Escritor y Periodista) 
La Vanguardia, 27/02/2025

La Diputació de València pone en marcha en Daimús su dispositivo para la limpieza de playas afectadas por la dana

La Diputació de València pone en marcha en Daimús su dispositivo para la limpieza de playas afectadas por la dana. Raquel Abulaila / Europa Press

El sector turístico es uno de los motores que propulsan el cohete de la economía española, que es la analogía que empleó el presidente Pedro Sánchez hace unos meses. Sin ir más lejos, la Comunidad Valenciana ha vivido el mejor año turístico de la historia, con casi 30 millones de visitantes, una tercera parte del total de España, lo que representa el 16% del PIB autonómico y más de 280.000 puestos de trabajo. Este año, la previsión apunta a un crecimiento de cerca de un 5%.
Ahora el reto es apostar por la calidad y mantener la sostenibilidad del modelo, como se reiteró con ocasión de FITUR, la gran feria del turismo; además de superar el frenazo provocado por la DANA y mejorar algunas infraestructuras como la ampliación del aeropuerto de Manises y la construcción de la segunda pista en el de Alicante-Elche. Es decir, actuaciones de calado. Lo que haga falta para mantener el modelo turístico centrado en el litoral y en las grandes ciudades que tantos éxitos ha reportado, a pesar de exigir cada año grandes inversiones para mantener el paisaje de la costa, renaturalizando las playas e intentando frenar la erosión, entre otros aspectos. Por eso se trabaja ahora a marchas forzadas en la retirada de los residuos de la DANA depositados en las playas de La Ribera y La Safor, antes de que arranque la nueva temporada.

Este sería el plano general. Pero a todo plano le corresponde, se muestre o no, un contraplano, que sería el que representa el sector del turismo de interior, mucho más humilde y modesto. Para hacernos una idea, unos 700 alojamientos acogieron en 2023 algo más de 150.000 viajeros con cerca de 360.000 pernoctaciones. Ocurre que también aquí el principal atractivo es el paisaje. En este caso, los bosques, los ríos, la fauna y la flora y, en algunos casos, el patrimonio artístico y arquitectónico. Pero este entorno está cada vez más amenazado por los incendios, la desertización y la pérdida de biodiversidad. Si el paisaje de las tierras de interior es también un reclamo para una parte más o menos significativa de esa fuente de ingresos que son los turistas, habrá que preocuparse y ocuparse algo más de él. Sobre todo de los rincones arrasados por el fuego, o por el abandono de la agricultura y la ganadería como consecuencia de la despoblación o la falta de rentabilidad de los cultivos. Habría que tomarse algo más en serio la necesidad de intervenir de manera efectiva, al menos en algunas zonas. Sin prisa pero sin pausa.
 
Zona de bosque quemado en el Alto Palancia, Castellón
Zona de bosque quemado en el Alto Palancia, Castellón
 
En el medio rural, la disponibilidad de recursos está demasiado condicionada por los limitados presupuestos municipales, así como por la arbitrariedad derivada de la sintonía o no de los alcaldes y alcaldesas con los dirigentes provinciales y autonómicos que gestionan los recursos. Por lo que, con frecuencia, la disponibilidad de medios en los municipios es tan exigua que no alcanzar a veces ni para mantener limpias de año a año sendas y caminos o para llevar a cabo pequeñas intervenciones en los parajes o lugares de interés para el visitante. 
 
Eso sí, cuando llega el buen tiempo, sobre todo a quienes vivimos en el litoral, nos gusta que todo esté en perfecto estado de revista. Lo que no es posible sin una política clara de inversiones y actuaciones que tenga un ojo permanentemente puesto en las zonas de interior. Tampoco sin el compromiso de todos nosotros. Incluso de los que solo se acuerdan de nuestros bosques y ríos cuando llega el buen tiempo o aprieta el calor. Hay múltiples iniciativas ciudadanas que necesitan apoyo económico y manos para llevar a cabo actuaciones modestas pero significativas para el medio natural. Solo hay que comprometerse un poco. El estado de nuestros bosques y de nuestros paisajes de interior tiene efectos en el litoral donde se asienta la mayor parte de la población. Ahí está la Dana y sus efectos para recordárnoslo.

Como señala Maria Josepa Payà en ‘Terra endins. Pensar el futur des del poble’, el último premio de ensayo Mancomunitat de la Ribera Alta: “Al món rural no necessitem discursos ni guies. El que volem és igualtat d’oportunitats, respecte a la diversitat i justicia en l’assignació de recursos econòmics”. Pues eso.
Nel.lo Pellisser (Escritor y Periodista) 
La Vanguardia, 27/02/2025


 

No hay comentarios:

Publicar un comentario