La sala Luis García Berlanga de la Filmoteca del Instituto Valenciano del Audiovisual y de la Cinematografía (IVAC) acogió el pasado lunes 27 de diciembre el preestreno de la miniserie titulada "Entre dos reinos".
'Entre dos reinos' es una miniserie histórica que retrata uno de los momentos cruciales de la historia del Reino de Valencia, el oscuro espacio en que la corona se queda sin heredero y las familias nobiliarias y los reinos vecinos pugnan por conquistar la parcela de poder que ha quedado huérfana.
La producción revive ese periodo de nuestra historia a través de la mirada de dos de los principales personajes que intervinieron en ella: San Vicente Ferrer, auténtica luz en medio la oscuridad y protagonista absoluto en la solución de las crisis sucesoria y Fray Juan Gilabert Jofré, (el Padre Jofré), amigo y confesor del anterior, que porfió contra los prejuicios de una época de tinieblas marcada por una cristiandad enfrentada por dos Papas, y un territorio habitado por judíos, moros y cristianos donde no había lugar para el débil, el enfermo o el pobre.
La serie enmarca la historia de amor irrefrenable pero imposible entre un médico judío y una noble valenciana, que transcurre en el contexto de la creación en Valencia del primer hospital psiquiátrico de Europa en la Alta Edad Media, el Hospital para Locos, Inocentes y Desamparados, encargado de acoger enfermos mentales estigmatizados por la sociedad, que fue impulsado por el padre Jofré con ayuda de San Vicente Ferrer, quien interfirió ante la nobleza valenciana para conseguir fondos para la construcción del centro. Este hospital digno de héroes y santos será el primer paso para que esos «locos» dejen de ser considerados poseídos por el diablo.Esta producción valenciana realizada por Trivisión, ha contado con un presupuesto de 1,65 millones de euros, y ha tenido a Miguel Perelló como director de un equipo integrado en su mayoría por técnicos y actores valencianos -muchos de ellos conocidos por su participación en "La Alquería Blanca"-, entre los que caben destacar a Jaime Linares como Vicente Ferrer, Juan Gea representará a Joan Jofré, Vanesa Romero será Leonor Centelles (la noble valenciana) y Emmanuel Esparza, que dará vida a Diego, el médico judío.. El resultado se podrá disfrutar en Canal 9, que será quien decida cuándo se emitirá, aunque ya ha comunicado que no existe fecha alguna prevista para su proyección por la pequeña pantalla y que, además, emitirá lo que debían ser sus dos capítulos de golpe —su metraje es de 120 minutos—para pasar página y evitar pérdidas de audiencia de un día para otro.
Para el director, este complejo contexto histórico, que pese a quedar en segundo plano se ha tratado con "mucho cuidado", es el que da cabida a los numerosos problemas a los que tiene que enfrentarse la pareja para salvar su relación. De igual manera, Perelló ha precisado que no se trata de una cinta sobre la figura del santo valenciano, y que el objetivo principal es "entretener, más que ser riguroso".
Por su parte, el productor ejecutivo, Ximo Pérez, comentó que la obra cinematográfica ha sido rodada en localizaciones originales, situadas en poblaciones valencianas como El Puig, Alfahuir, Valencia, Requena o Xátiva, que no han aparecido nunca antes en la gran pantalla, mientras que los interiores se rodaron en la Ciudad de la Luz de Alicante.
Primeras críticas
Pero el estreno de Entre dos reinos, el enésimo proyecto de Presidencia de la Generalitat como productora de series y películas en torno a prohombres valencianos—antes con TVE y ahora para TVV— no ha hecho sino encender más aún las alarmas sobre el control que ejerce la Administración sobres estas producciones, el gasto que suponen, la rentabilidad social y los mecanismo de supervisión de los propios proyectos en sí. Los criterios que se siguen en las adjudicaciones son una nebulosa.
Y es que son ya más de 30 millones de euros los que lleva gastados la Generalitat Valenciana en encargos de este tipo, y curiosamente el director de Entre dos Reinos y la productora de la misma Trivisión han sido dos de los más afortunados del reparto. Se da la circunstancia de que algunas de sus películas han sido de las que peor paradas han salido por parte de la crítica. Frente a otros proyectos fallidos como la película en torno a Severo Ochoa, Martín y Soler o Ausiàs March, bien es cierto que otros han salido mejor parados y su rentabilidad cinematográfica y social aún se valoran. Tal es el caso de las cintas basadas en Blasco Ibáñez o las propias biografías de Sorolla o el escritor republicano. El caso más reciente es el de la vida de Tarancón, que salvó con cierta nota su estreno, y Canal 9 y Presidencia de la Generalitat organizaron en torno a ella todo tipo de gestos para su promoción.
En el caso concreto de esta nueva entrega dedicada al Padre Jofré ya no sólo las dudas surgen por la cuestionada calidad del producto, como así reflejaban los asistentes al preestreno del pasado lunes, sino por los errores históricos que aparecen en su contenido. A ello hay que añadir una dirección e interpretación también cuestionada y haber perdido la oportunidad de dejar constancia sólida de una época y una serie de personajes claves de la Historia de Valencia.
Primeras críticas
Pero el estreno de Entre dos reinos, el enésimo proyecto de Presidencia de la Generalitat como productora de series y películas en torno a prohombres valencianos—antes con TVE y ahora para TVV— no ha hecho sino encender más aún las alarmas sobre el control que ejerce la Administración sobres estas producciones, el gasto que suponen, la rentabilidad social y los mecanismo de supervisión de los propios proyectos en sí. Los criterios que se siguen en las adjudicaciones son una nebulosa.
Y es que son ya más de 30 millones de euros los que lleva gastados la Generalitat Valenciana en encargos de este tipo, y curiosamente el director de Entre dos Reinos y la productora de la misma Trivisión han sido dos de los más afortunados del reparto. Se da la circunstancia de que algunas de sus películas han sido de las que peor paradas han salido por parte de la crítica. Frente a otros proyectos fallidos como la película en torno a Severo Ochoa, Martín y Soler o Ausiàs March, bien es cierto que otros han salido mejor parados y su rentabilidad cinematográfica y social aún se valoran. Tal es el caso de las cintas basadas en Blasco Ibáñez o las propias biografías de Sorolla o el escritor republicano. El caso más reciente es el de la vida de Tarancón, que salvó con cierta nota su estreno, y Canal 9 y Presidencia de la Generalitat organizaron en torno a ella todo tipo de gestos para su promoción.
En el caso concreto de esta nueva entrega dedicada al Padre Jofré ya no sólo las dudas surgen por la cuestionada calidad del producto, como así reflejaban los asistentes al preestreno del pasado lunes, sino por los errores históricos que aparecen en su contenido. A ello hay que añadir una dirección e interpretación también cuestionada y haber perdido la oportunidad de dejar constancia sólida de una época y una serie de personajes claves de la Historia de Valencia.
Fuentes: La Verdad - gva.es - Las Provincias - Levante-EMV - ABC
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